Cada vez son más los municipios pequeños que se interesan por esta modalidad turística que sirve para reactivar la economía local. El hecho de que los autocaravanistas viajen con “la casa a cuestas” y que lo hagan durante largos periodos, supone acabar con dos de los principales problemas que hay en el mundo rural, como es la falta de plazas hoteleras y el trabajo fuera de temporada. Por ello, el Caravaning se está valorando cada vez más como una fórmula rápida para acercar a los turistas a eso pueblos con encanto que hay por toda nuestra geografía. Tan solo una pequeña infraestructura, de apenas 30/40 metros cuadrados, con el equipamiento suficiente para facilitar a los autocaravanistas agua potable, y dos puntos de vaciado, para las aguas grises y negras, basta para crear una red de áreas de servicio que aparecerá en las principales aplicaciones de móvil y facilitará la llegada de estos incansables viajeros a los puntos más recónditos de todo el territorio.
AQUIESTOY CARAVANING centra sus esfuerzos precisamente es hacer todo esto lo más fácil posible, asesorando a los ayuntamientos a la hora de impulsar estas áreas de servicio, cuyo coste rara vez supera los 15.000 euros. Los datos son claros y España sigue a la cola de Europa en esta materia, a pesar de ser el país que más autocaravanistas recibe del extranjero. En el resto de Europa hace años que lo tienen claro y por eso en Francia, Italia o Alemania suman más de 15.000 áreas de servicio frente a los apenas 900 que hay en España.
Aunque España es el país en el que más creció el Caravaning en el último ejercicio, estamos aún lejos de las cifras de matriculaciones del resto de Europa. Basta comparar las 40.000 autocaravanas aproximadamente que hay en España, con las 505.000 que hay en Francia. En su conjunto, en Europa hay dos millones de autocaravanas, lo que supone que 5 millones de personas disfrutan del Caravaning todos los años con vehículos en propiedad, más los que optan por el alquiler. Personas de nivel económico medio alto, que viajan una media de 40 días al año, y muy comprometidas con el medio ambiente. Es por ello que cada año, son más los ayuntamientos que se interesan por este tipo de turismo e impulsan las infraestructuras necesarias para recibirlo con los brazos abiertos.